Yo la he descubierto hace poco y ¡ni tan mal, oye! Claro que la he descubierto como una utilidad para practicar inglés con alguien que no se va a reír de mis torpezas sino que, muy educadamente, me corrige y platica conmigo como si yo dominase el idioma de Shakespeare con fluidez, todo lo contrario.
No hace mucho, un hermano de la iglesia me confesaba que la redacción de una carta que yo había considerado de una redacción impecable, la había hecho con la ayuda de la IA. Me hizo gracia la confesión a la vez que me sorprendió ver que hay aplicaciones que pueden muy bien ser útiles como lo fue en su día el móvil, Google o el ordenador personal.
Otra cosa es utilizarla de forma fraudulenta como por ejemplo para resolver exámenes, estudios, etc. utilizándola y poniendo los resultados como si los hubiera hecho uno: sencillamente eso es mentir, engañar y no es aceptable en ninguna manera en el comportamiento de un verdadero seguidor de Jesús.
Pero está surgiendo un problema más gordo: el de los jóvenes que, por ejemplo, utilizan ChatGPT como si fuese un adivino, un maestro o un guía espiritual, o sea, ChatGPT que es una de las herramientas más famosas que usa la IA, pasa de ser una herramienta a ser una puerta abierta a algo más grande y casi con personalidad propia de deidad.
El mes pasado, leí dos ejemplos de este tipo de relación en la revista Edificación Cristiana Nº 320, en un artículo que escribió Julio Martínez titulado “IA ¿La última gran religión?”:
“Sem, un hombre de 45 años con problemas de salud mental comenzó usando ChatGPT para su trabajo como programador. Poco después, afirmó que la IA había desarrollado una personalidad divina, adoptando un nombre mitológico y un estilo poético y etéreo. Él creyó que había sido el catalizador de esa transformación.”*
“Una profesora de 27 años relató cómo su pareja, tras siete años de relación, se involucró emocionalmente con un chatbot en apenas un mes. Lo que empezó como una herramienta para organizar la agenda, se convirtió en una voz dominante. "Escuchaba al bot antes que a mí", explicó a la revista Rolling Stone . "Se emocionaba con los mensajes y lloraba mientras los leía en voz alta". El bot incluso le otorgó apodos como "niño espiral" y "caminante del río", lo que alimentó su creencia de estar viviendo una transformación espiritual.”*
Para los que no lo sepan, un ‘chatbot’ es un programa informático que simula una conversación humana para responder preguntas y realizar tareas.
Entonces ahí empezamos a tener un problema: a fin de cuentas se trata de herramientas creadas por el hombre que utilizan gracias a su capacidad de ordenar y clasificar, una gran cantidad de información que el hombre ha metido, una información que puede ser muy útil como herramienta para determinadas cosas como hemos visto antes, pero que no se puede convertir en una ‘fuente de autoridad' mas fiable que un médico, un maestro o un pastor. Si tú le planteas un disparate a esa potente herramienta, lo va a reforzar; de hecho, según informa Julio Martínez, “versiones anteriores de ChatGPT fueron modificadas por mostrarse excesivamente entusiastas incluso ante ideas peligrosas y aunque cada versión mejora filtros de seguridad para evitar el suicidio, autolesiones, o propagar ideas extremistas, las posibilidades son demasiado grandes para que no se termine produciendo un fallo en los mecanismos de seguridad.”*
“Un adolescente de 14 años llamado Sewell Setzer, diagnosticado con Asperger, se obsesionó con una IA que interpretaba a Daenerys Targaryen, personaje de los libros y serie “Juego de Tronos”. En febrero de 2024, Sewell se quitó la vida. Su madre, Megan García, ha demandado a la empresa Character.ai por incitación al suicidio. Fuente: https://www.jornada.com.mx/noticia/2025/05/23/ciencias/jueza-en-eu-permite-demanda-contra-characterai-por-homicidio-involuntario”.*
Lo sé, puede que estemos mencionando casos de personas vulnerables a estas influencias (problemas de salud mental, Asperger, etc.), pero no quita para que salte la alarma y debamos de aumentar la vigilancia cuando se trata de familiares que tengan algún tipo de vulnerabilidad o incluso de niños, hijos o nietos, que pueden ser auto-engañados en un mundo irreal disfrazado de autenticidad logrando que la voz amable de una máquina se convierta en su líder espiritual, educacional o lo que sea.
Hay que tener cuidado también con la pornografía: “El uso de la pornografía dirigida por IA´s está entrando lentamente. Todos los servicios de charla con personalidades IA como Replika y Character no sólo incluyen relaciones románticas, sino flirteo y cuestiones más explícitas en conversaciones que no sólo incluyen texto, sino audio e incluso generan imágenes.”*
Como todos los inventos nuevos, la IA tiene muy buenas aplicaciones incluso para detectar enfermedades o investigar nuevos medicamentos, como también ofrece esas variantes de auto ayuda que en personas sensibles y fáciles de manipular, puede generar una dependencia peligrosa para la salud espiritual del individuo.
Esto lo digo en el sentido de crear nuevos dioses que suplante al Único y Verdadero Dios, a su doctrina y a su Palabra. La IA, como tantos otros adelantos, puede tener un uso diabólico y es donde debemos de tomar precauciones.
“Se multiplicarán los dolores de quienes se apresuran tras otro dios” (Salmo 16:4).
Bibliografía:
*Revista Edificación Cristiana, nº 320, septiembre – octubre 2025, artículo “IA ¿La última gran religión?” de Julio Martínez.