domingo, 21 de julio de 2013

PENSAMIENTOS

“En cuanto a lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honorable, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre, si hay virtud alguna, si hay algo que merece alabanza, en esto pensad.” (Filipenses 4:8)

pensar en todo lo que es verdadero, justo, puro, honorable, amable
¿Podemos controlar nuestros pensamientos? Cuando el apóstol Pablo escribió la carta a los filipenses, entre otras cosas, les envió este consejo acerca de la vida del pensamiento. ¡Qué contraste ¿verdad? para los tiempos en que vivimos! Lo honorable, lo que es de buen nombre… suena a tiempos  lejanos, suena a costumbres perdidas. Bueno, esta carta se cree que fue escrita entre los años 60 y 63 d. C., pero, como está escrita inspirada por el Espíritu Santo de Dios, podemos decir que es atemporal porque lo que está escrito en ella, aunque en principio iba dirigida a los cristianos filipenses, hoy va dirigida a todos los verdaderos cristianos, los que han creído en Cristo de verdad y quieren vivir como cristianos, esto es, seguidores de Jesús.
Pero, ¿podemos conseguir pensar solamente de la manera que nos aconseja este texto en el tiempo que nos ha tocado vivir? Muchas veces mi mente se llena de las cosas que no quiero y lucho para conseguir quitarlas de ella porque me llevan a otra época y a otras situaciones que he dejado atrás, con las que ya no quiero tener nada, pero, sin embargo, vienen a mi mente.
En otras ocasiones, consciente o inconscientemente, provoco que la mente se llene de cosas distantes u opuestas a las del consejo de Pablo. ¿Cómo? Pues con una película, un programa de tv, un debate en la radio, un artículo en la prensa. Hay mil “entradas” a nuestra mente que buscan exactamente lo contrario a “todo lo puro”. Los psicólogos están de acuerdo en los peligros que arrastran los ‘pensamientos negativos’ y en este consejo lo que vemos es una invitación a pensar positivamente.

jueves, 4 de julio de 2013

¿Un Amigo Imaginario?

A veces se nos trata a los creyentes como a persona ingenuas por creer en la existencia de
arte, belleza, sensibilidad, creados a imagen de Dios
Dios; a veces se no compara con esos niños que como fruto de su fantasía, se inventan un amigo imaginario con el que juegan, hablan…

La Biblia dedica muchos textos para explicar las evidencias de la existencia de Dios, pero también nos revela la reacción divina ante la incredulidad humana, por ejemplo cuando dice: “Porque la ira de Dios se revela desde el cielo contra toda impiedad e injusticia de los hombres que detienen con injusticia la verdad(Romanos 1:18).
Partiendo de la base de que Dios es un Dios de Verdad porque la Verdad forma parte de su esencia (“Dios de verdad y sin ninguna iniquidad en él” (Deuteronomio 32:4)), algo que reafirmó Jesús cuando dijo: “Yo soy la verdad”, es duro ver que hay hombres que dedican sus esfuerzos en detener esta Verdad mientras que no se inmutan ante el avance del poder de la mentira en el mundo.
“Porque lo que de Dios se conoce les es manifiesto, pues Dios se lo manifestó. Porque las cosas invisibles de Él, su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que no tienen excusa” (Romanos 1:19-20). La misma creación habla de diseño, orden, denota sabiduría, son evidencias visibles que el hombre trata de encubrir con una espesa niebla de argumentos humanos interesados en ocultar Su presencia. Claro, tienen un problema: si Dios lo ha manifestado ¿cómo ocultarlo? Pues utilizando todas las artimañas posibles de las cuales se vale con gran destreza el príncipe de este mundo, el padre de mentira, Satanás, que en un esfuerzo titánico y concienzudo, riza el rizo consiguiendo poner en duda su propia existencia, de manera que puede aún trabajar en las mentes y en las conciencias de las personas como si ellas mismas fueran las inventoras de sus argumentos. “Cuando habla mentira de suyo hable; porque es mentiroso, y padre de mentira” dijo Jesús que lo conoce bien.