¿Aires de revolución?

Creo que la gente empieza a cansarse de esta situación. Palabras que han pasado de ser desconocidas a ser el pan de cada día: Cohecho, estafa, fraude fiscal, blanqueo de capitales, malversación, prevaricación, falsedad, estafa... en definitiva corrupción, muy especialmente en el mundo de la política.

Claro, a raíz de esto es normal que el titular del periódico del domingo fuese: “El 96% de los españoles cree que la corrupción política es muy alta.” Y “El 95% cree que los partidos protegen y amparan a los acusados de corrupción.” Todo esto según el último sondeo de Metroscopia para El País pero me parece que es algo tan evidente que casi no son necesarios los sondeos para descubrirnos a que extremos hemos llegado. Y la sensación que nos llega a los simples ciudadanos es que se descubren todas estas situaciones y parece como que no se hiciese nada, o que la justicia está tan saturada de este tipo de basura que se ha bloqueado, el óxido y el orín han estropeado la ya de por sí débil maquinaria justiciera y como consecuencia el virus se va mutando de una comunidad a otra y se va multiplicando y multiplicando hasta que revienta por falta de espacio y vuelve a saltar el escándalo que, de tanto repetirse, se está convirtiendo en algo monótono, diario, en un terrible empacho de pasotismo, de burla, de humillación de aquellos que subsisten el día a día buscando un mal pagado trabajo, de aquellos que subsisten el día a día buscando la mejor (y honrada) forma de llevar dinero a casa para, al menos, tener para comer.

No sé, pero siento en el ambiente, en los comentarios, en las reacciones, que se está llegando al límite de la paciencia de la ciudadanía. Como todavía nos permiten pensar (de momento es gratis), la gente se está moviendo. Hace un par de semanas leí un artículo sobre un partido nuevo llamado “Partido X”, que se auto-proclama partido del futuro, que pretende acabar con políticos y banqueros corruptos: Internet es su plataforma, no hay portavoces ni caras visibles y pugnan por una democracia en la que se pueda "resetear" el espacio político. Una muestra de que algo se está cociendo.

15M, NoLesVotes, 15S, gota a gota se va llenando el vaso y parece que el agua está rebosando… El Partido X no tiene caras visibles, de momento, que lo representen o nos digan quién está detrás de todo esto, pero sus argumentos son interesantes y van en la línea de lo que manifiestan los de los movimientos, 15M, 15S, etc., aparentan ser movimientos democráticos que tratan de romper con el arnés que parece llevamos puesto desde unos años para aquí: 2 grandes partidos, ahora-salgo-yo-me-enriquezco-lo-hago-mal, ahora-sales-tú-te-enriqueces-lo-haces-mal, ahora-salgo-yo…

A lo mejor empezamos a ser un poco Europa, limpiamos toda esta vieja escuela y empezamos a funcionar de nuevo con aires limpios de corrupción, egoísmo, manipulación, ansias de poder, etc.

Lo importante es que las cosas se vayan desarrollando sin violencia, con libertad pero sin libertinaje, con alegría pero llevando un orden y una disciplina responsable, sin prisas pero sin pausa, con honestidad… ¿será posible?

Lo que tiene que parar es esta escalada de robos a cara descubierta. Es enfermiza la sonrisa del que ha sido descubierto robando a manos llenas y, poniendo cara de “yo no he roto un plato en mi vida”, se dirige hacia la cámara diciendo: “Soy completamente inocente de lo que se me acusa. Los tribunales me darán la razón.” Finalmente los tribunales lo encuentran culpable, dictan sentencia y a continuación la cifra astronómica de una fianza que se nos antoja imposible de pagar pero que, ya casi sin sorprendernos, se paga. Por supuesto, siempre muy inferior a los millones que se han robado y que, en la mayoría de los casos, no son devueltos. Vergüenza se queda sin significado ante este desfile de ladrones de guante blanco, blanco pero sucio, que han invadido este País.

No sé si estos “movimientos” conseguirán algo pero espero que sí. Al menos se puede hablar y publicar lo que se piensa, se denuncian casos, se habla de ellos en las radios y televisiones; ha estado muy bien lo que hemos podido ver y oír en el programa de Jordi Évole “Salvados”, en donde se ha puesto de evidencia, de nuevo, la caradura de algunos de estos individuos. Pero, los que éramos fieles seguidores de ese programa y que estamos ávidos de noticias de que por-fin-se-empieza-a-hacer-algo, deseamos eso, movimiento, acción, buenas ideas, honradez, conceptos nuevos, perspectiva de futuro, honestidad, pasos reales de limpieza, NO violencia, responsabilidad, civismo, pensar en los demás, educación, respeto, sabiduría, buena gente, soluciones, ayudas de los que más tienen a los que menos, respuestas…

Ojalá esos aires que se empiezan a sentir se conviertan en vientos de energía limpia, pura, que mueva las aspas de este viejo molino, de esta gente que no tiene culpa de lo que pasa, de esta ciudadanía sufridora pero ansiosa de verdadera justicia. Dios lo quiera.